La alcaldesa mayor, Claudia López, entregó desde la plaza de banderas de la Alcaldía Mayor de Bogotá un detallado inventario de las apuestas con las que su gobierno comenzó a pagar la deuda social, ambiental y de movilidad que por décadas han agobiado a las y los bogotanos.
“Mi propuesta fue hacer un nuevo Contrato Social y Ambiental para la Bogotá del siglo XXI, porque tenemos una enorme deuda con la ciudad, comenzamos a pagar esa deuda social y ambiental que teníamos con Bogotá, pero en particular con casi tres millones de ciudadanos que están en una muy alta situación de vulnerabilidad”, dijo la Alcaldesa Mayor, quien estuvo acompañada del secretario de Planeación, Felipe Jiménez; la secretaria de Movilidad, Deyanira Ávila; la secretaria de Hábitat, Nadya Rangel, el director del Instituto de Desarrollo Urbano – IDU, Diego Sánchez; y el gerente de RenoBo; Juan Guillermo Jiménez.
La Alcaldesa Mayor recordó que en la primera zona de la ciudad donde se pagará la deuda social, ambiental y de movilidad será la del borde suroccidental donde hoy se construye la primera línea del Metro de Bogotá. “El Metro es la punta de lanza con la que vamos pagando esta enorme deuda social y ambiental, por eso arranca en Kennedy y Bosa, pasa por el Centro y llega a la Calle 72 con Avenida Caracas”, explicó.
Al respecto, el secretario de Planeación, Felipe Jiménez, añadió: “le estamos dejando a la ciudad el Plan de Transporte más ambicioso de los últimos años, estamos dejando una línea de Metro en construcción, estamos dejando un proceso de contratación de la línea 2, y le entregaremos a la nueva administración la pre factibilidad de la línea 3. También avanzamos en la construcción de dos cables aéreos, el de San Cristóbal y el Ciudad Bolívar”.
Es importante tener en cuenta que, en el borde suroccidental, donde hoy avanza en un 27 % la construcción de la Primera Línea del Metro, que arranca en el patio taller de Bosa hasta la Calle
72 con Avenida Caracas, también se construye el polo de desarrollo Gibraltar frente a la estación No. 1, compuesto por una Manzana de Cuidado, un CEFE, un velódromo y una pista de atletismo.
Además, esta línea se complementa con otras obras de movilidad como el Corredor Verde Séptima, la troncal alimentadora de la Avenida 68 y Avenida Ciudad Cali, y tendrá 24 kilómetros de extensión con 16 estaciones.
La Alcaldesa de Bogotá también recordó los proyectos del borde oriental: Primera Línea de Metro, Corredor Verde Séptima, Accesos Norte y la extensión de la Avenida Boyacá, que hoy recibió por parte de la Corporación Autónoma Regional – CAR, la licencia ambiental para su construcción desde la calle 183 hasta la calle 235; y los proyectos del borde noroccidental, como lo son la Ciudadela Educativa y del Cuidado, la línea dos del Metro, que será subterránea e iniciará en la Calle 72 con Avenida Caracas hasta el patio taller en Suba, así como la ALO Norte Urbana.
“Lo que sigue es pagar la deuda social y ambiental con el noroccidente de Bogotá, que es del tamaño de Barranquilla. Dejamos paga esa deuda con la segunda línea del Metro para que estos ciudadanos, más de 2,5 millones, se demoren 27 minutos en llegar al centro; y con el uso de las 74 hectáreas de suelo público se hará la ALO Norte Urbana, que queda financiada y estructurada”, confirmó la alcaldesa Claudia López.
Sobre la ALO Norte Urbana el director del IDU, Diego Sánchez, detalló que “tiene contratados los estudios y diseños definitivos, tendrá cuatro tramos, el primero será de 1.3 km y va de la Calle 80 a la Avenida Morisca sin tocar el humedal Juan Amarillo; el dos de 0,6 kilómetros inicia en la Avenida Morisca hasta la carrera 91; el tramo tres de 1,18 km inicia en la carrera 91 hasta la Avenida Rincón; y el tramo cuatro de 3,7 km que va desde los humedales Juan Amarillo y la Conejera hasta la Avenida Ciudad de Cali”.
Otros proyectos de gran magnitud en el borde occidental son la construcción del intercambiador de la Calle 80 y la ampliación de las calles 63 y 13; en el borde sur se avanza en la construcción de la ALO Sur, que inicia en el sector de Canoas hasta la Calle 13, el Cable Potosí en Ciudad Bolívar, y se construirá la línea 3 del Metro, de la que la actual administración entrega su pre factibilidad y recursos contemplados para llevarla a nivel de factibilidad. Esta línea iniciará cerca a la plaza fundacional de Soacha y conectará con la estación 13 de la primera línea.
Corredor Verde de la Séptima
En total serán 22 kilómetros con transporte público cien por ciento eléctrico a cargo de ‘La Rolita’, operador de transporte público de la ciudad, con 23 eco-estaciones abiertas, estéticamente integradas con el entorno urbano, el primer patio portal de transporte masivo totalmente eléctrico, 24 kilómetros de ciclorruta segregada con vegetación, 280.000 metros cuadrados de espacio público y 16 plazas alamedas.
La obra prevé una inversión total de 2.5 billones de pesos, de los cuales 1.3 billones ya están comprometidos para el tercer tramo, que tiene una extensión de 12.5 kilómetros, este tramo que va desde la calle 99 a la 200 se divide en tres segmentos para su construcción:
Respecto a los tramos 1 y 2, el director del IDU, Diego Sánchez, informó: “el Corredor Verde Séptima es un proyecto que tiene cinco lotes distintos, tres contratos ya están firmados y arrancan obras en enero, faltan dos, el lote uno que tiene un presupuesto de $529.388 millones y va de la calle 24 hasta la calle 76 y el lote dos que tiene un presupuesto de $529.388 millones, inicia en la calle 76 hasta la 99. Ayer se publicaron los pliegos definitivos en Secop II y en marzo deben ser adjudicados”.
Precisamente, sobre este importante proyecto de movilidad la Alcaldesa de Bogotá expresó: “desde el punto de vista técnico y jurídico el Corredor Verde Séptima no tiene reversa, le mejora los tiempos de movilidad a quienes se movilizan por esta importante vía, principalmente a los que utilizan transporte público, además tendrá carriles exclusivos para transporte 100% eléctrico”.
Ciudadela Educativa y del Cuidado
Con este proyecto finalmente la localidad de Suba contará con un Multicampus Universitario, el cual será realidad gracias a la alianza entre el Gobierno Nacional y la Alcaldía de Bogotá, a través de un acuerdo entre el Ministerio de Educación, la Agencia Distrital para la Educación
Superior, la Ciencia y la Tecnología – Atenea – y la Secretaría de Educación, beneficiando a una población de 17.000 estudiantes.
Como resultado de la adjudicación de este proyecto la ciudad contará con recursos cercanos a los 500.000 millones de pesos, que serán invertidos prioritariamente en una biblioteca zonal con aula cultural, el Museo Muisca, un colegio completo y una Manzana del Cuidado. Además, quedará el suelo urbanizado para el desarrollo de un hospital con capacidad de 250 camas y una estación de Policía, un jardín infantil, un Centro Crecer, otro colegio completo, tres centros de salud, una Casa de Justicia y una estación de bomberos que fortalecerán los servicios a la ciudadanía del Sistema Distrital del Cuidado en la zona.
También se construirá la Avenida Longitudinal de Occidente (ALO) Urbana entre la Calle 80 y la calle 153. Esta vía en Engativá contará con un perfil vial de dos calzadas vehiculares, conformadas por tres carriles de circulación cada una, en Suba tendrá un perfil vial de dos calzadas vehiculares, conformadas por dos carriles de circulación a modo de par vial, ambos tramos incluyen ciclo-infraestructura en todo su trayecto, así como franjas peatonales y paisajísticas.
Así mismo, la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá - EAAB ESP – tiene previsto ejecutar las obras de redes matrices y la totalidad de obras de alcantarillado necesarias para la Actuación Estratégica, que mejorarán el manejo de aguas lluvias y el abastecimiento de agua potable para los vecinos de este sector.
Adicionalmente, en las 13 hectáreas desarrollables, definidas como “ámbitos privados”, se realizará la construcción de más de 9.000 unidades de vivienda de interés social (VIS), prioritario (VIP), NO VIS y áreas comerciales, que financiarán obras públicas por más de medio billón de pesos.
“Dejamos una Bogotá en obra, con trabajo, que ya no habla del Metro, sino que lo construye, que ya no habla de pagar la deuda social y ambiental, sino que la paga, que ya no habla de reverdecer a Bogotá, sino que siembra 670.000, que ya no habla de proteger la estructura ecológica principal, sino que la amplió en un 30 % de área y la deja protegida para que nadie la pueda endurecer ni urbanizar. Esto es lo que paga nuestro ‘pedacito’ de deuda ambiental con el planeta”, concluyó la mandataria de la capital.